La mayoría de los propietarios hacen énfasis en reforzar la seguridad de sus puertas, pero pocas veces se interesan en hacer lo mismo con las ventanas. Debes saber que, éstas son el segundo punto de acceso que frecuentan los delincuentes, así que… toma nota.

Seguridad de los modelos de ventanas

Aquí vamos a darte una breve explicación acerca de algunos puntos débiles de los diferentes modelos de ventanas, así podrás consultar a tu cerrajero de confianza, cómo reforzar los niveles de seguridad.

Existen diferentes tipos de ventanas, pero las más utilizadas son las que te explicamos a continuación.

Oscilobatientes. Es considerado un modelo con un nivel de seguridad bastante elevado, en especial por el sistema de bloqueo.

Practicables. Es similar al modelo anterior, así que también se considera una ventana con elevado nivel de seguridad.

Correderas. Son muy estéticas, pero su nivel de protección es bajo y vas a requerir algunas mejoras. De hecho, los profesionales las recomiendan para pisos ubicados en altura.

Plegables. Un modelo elegante, pero se recomienda que sean elaborados con cristales laminados, en caso contrario, la vivienda será un blanco fácil para los delincuentes.

Nivel de seguridad que ofrecen los materiales

Las ventanas, al igual que las puertas, pueden ser elaboradas en diferentes materiales, algunos con mayor resistencia que otros, siendo estos los más utilizados.

Madera. Como ocurre con las puertas, las ventanas en madera ofrecen un elegante estilo y son muy acogedoras, sin embargo, al hablar de nivel de seguridad, este es muy bajo, porque el marco puede resultar muy fácil de romper, con las herramientas correctas.

Aluminio o PVC. Su aspecto es más moderno, pero sin dudas, estos materiales ofrecen mayor resistencia ante el ataque de los delincuentes.

Tipos de cristales

Parte del encanto de las ventanas son los cristales, pero, si no son los adecuados, pueden ser un punto débil para que los delincuentes ingresen a tu hogar, por esta razón sugerimos estos.

Laminados. Este tipo de cristales está conformado por dos vidrios, entre ellos, se encuentra una película plástica, muy resistente, que impide el paso a través de la ventana, aunque se agriete el cristal.

Armados. Similar a los laminados, aunque los cristales se logren romper, los trozos de vidrio se van a mantener en su lugar, gracias al uso de finos alambres de acero inoxidable.

Complementa la seguridad de tus ventanas

Existen diferentes elementos que están diseñados para mejorar la seguridad de tus ventanas, así que no será necesario el reemplazo inmediato de la ventana actual, solo consulta con tu cerrajero, cuál de estas opciones va mejor para las ventanas.

Sistemas de topes y bloqueos. Estos se encargan de trabar las hojas de las ventanas en la posición que prefieras, así la podrás cerrar por completo o solo dejar una pequeña abertura para permitir la ventilación del lugar.

Cerraduras y cerrojos. Ideales para las ventanas practicables o correderas. Puedes colocar modelos con llave o con pasador, así podrás bloquear cualquier movimiento en este tipo de ventanas desde la parte interna de la habitación.

Reforzar las bisagras. Este proceso es recomendable, de esta manera estarás protegiendo las ventanas del uso de la técnica de apalancamiento.